Aprendizaje basado en problemas

El aprendizaje basado en problemas es un método de enseñanza innovador en el que se utilizan problemas complejos del mundo real como vehículo para promover el aprendizaje de conceptos y principios por parte de los estudiantes, en contraposición a la presentación directa de hechos y conceptos.

http://148.202.167.116:8080/xmlui/bitstream/handle/123456789/574/Aprendizaje%20basado%20en%20problemas.pdf?sequence=1&isAllo


APRENDIZAJE BASADO EN PROBLEMAS
PROBLEM – BASED LEARNING
PATRICIA MORALES BUENO* Y VICTORIA LANDA FITZGERALD
Pontificia Universidad Católica del Perú, Departamento de Ciencias, Sección Química, Lima, Perú
*Correspondencia: Pontificia Universidad Católica del Perú, Departamento de Ciencias, Sección Química, Av. Universitaria, cuadra
18 s/n, San Miguel, Lima 32, Perú. Teléfono: 51-1-626-2000 Anexo 4228. Fax: 51-1-261-3647. e-mail: pmorale@pucp.edu.pe
RESUMEN
El Aprendizaje Basado en Problemas, desde sus inicios en la Escuela de Medicina de la Universidad de McMaster
(Canadá), se presentó como una propuesta educativa innovadora, que se caracteriza porque el aprendizaje
está centrado en el estudiante, promoviendo que este sea significativo, además de desarrollar una serie de
habilidades y competencias indispensables en el entorno profesional actual. El proceso se desarrolla en base a
grupos pequeños de trabajo, que aprenden de manera colaborativa en la búsqueda de resolver un problema
inicial, complejo y retador, planteado por el docente, con el objetivo de desencadenar el aprendizaje autodirigido de sus alumnos. El rol del profesor se convierte en el de un facilitador del aprendizaje.
Aunque la propuesta educativa se originó y se adoptó primero en las escuelas de medicina de diferentes
universidades de prestigio, los logros alcanzados han motivado que sea adoptada en una gran variedad de
instituciones y especialidades en todo el mundo.
PALABRAS CLAVES: Aprendizaje Basado en Problemas, educación, aprendizaje centrado en el estudiante.
ABSTRACT
From its beginnings, in the Medicine School at McMaster University (Canada), the Problem-Based Learning
appears like an innovating educative proposal, that is characterized so that the learning is student centered,
promoting significant learning as well as the development of a number of important skills and abilities in the
present professional surroundings. The process is developed on the basis of small work groups which go
through a cooperative learning process, in order to search for a track to solve an initial complex and challenging
problem, proposed by the teacher, with the objective to propitiate the self-learning of the students. The
professor becomes a facilitator of the learning process. Although this educative proposal was originated and
it was adopted first in the Medicine Schools of different prestigious universities, the reached achievements of
the method have motivated its implementation in a great variety of institutions and careers anywhere in the
world.
KEYWORDS: PBL, education, student-centered learning.
Recepción: 16/06/04. Revisión: 30/08/04. Aprobación: 29/10/04
Los estudiantes aprenden de muy diversas maneras, pero en cualquier situación el profesor posee el poder de crear condiciones que
puedan ayudar a sus estudiantes a aprender.
PARKER J. PALMER, “The Courage to Teach”

  1. LOS ORÍGENES DEL ABP
    En las décadas de los 60’s y 70’s un grupo
    de educadores médicos de la Universidad de
    McMaster (Canadá) reconoció la necesidad
    de replantear tanto los contenidos como la
    forma de enseñanza de la medicina, con la
    finalidad de conseguir una mejor preparaTheoria, Vol. 13: 145-157, 2004 ISSN 0717-196X
    Revisión
    146
    Theoria, Vol. 13: 2004
    ción de sus estudiantes para satisfacer las
    demandas de la práctica profesional. La educación médica, que se caracterizaba por seguir un patrón intensivo de clases expositivas de ciencia básica, seguido de un programa exhaustivo de enseñanza clínica, fue convirtiéndose gradualmente en una forma inefectiva e inhumana de preparar estudiantes,
    en vista del crecimiento explosivo de la información médica y las nuevas tecnologías, además de las demandas rápidamente cambiantes de la práctica profesional. Era evidente,
    para estos educadores, que el perfil de sus
    egresados requería habilidades para la solución de problemas, lo cual incluía la habilidad para adquirir información, sintetizarla
    en posibles hipótesis y probar esas hipótesis
    a través de la adquisición de información adicional. Ellos denominaron a este proceso
    como de Razonamiento Hipotético Deductivo.
    Sobre esta base, la Facultad de Ciencias
    de la Salud de la Universidad de McMaster
    estableció una nueva escuela de medicina,
    con una propuesta educacional innovadora
    que fue implementada a lo largo de los tres
    años de su plan curricular y que es conocida
    actualmente en todo el mundo como Aprendizaje Basado en Problemas (ABP) (Problem
    Based Learning, PBL) (Barrows, 1996).
    La primera promoción de la nueva escuela
    de medicina de la Universidad de McMaster
    se graduó en 1972. Por el mismo tiempo, la
    especialidad de Medicina Humana de la
    Universidad de Michigan implementó un
    curso basado en resolución de problemas en
    su currículo preclínico. También a inicios de
    los años 70’s las universidades de Maastricht
    (Holanda) y Newcastle (Australia) crearon
    escuelas de medicina implementando el
    Aprendizaje Basado en Problemas en su estructura curricular. A inicios de los 80’s, otras
    escuelas de medicina que mantenían estructuras curriculares convencionales empezaron a desarrollar planes paralelos estructurados en base al ABP. La universidad que
    lideró esta tendencia fue la de New Mexico,
    en los Estados Unidos. Un poco más tarde
    otras escuelas asumieron el reto de transformar su plan curricular completo en una estructura ABP. Las universidades líderes en
    esta empresa fueron la de Hawai, Harvard y
    Sherbrooke (Canadá) (Barrows, 1996).
    En los últimos treinta años el aprendizaje basado en problemas ha sido adoptado por
    escuelas de medicina en todo el mundo. Más
    recientemente ha sido aplicado en una diversidad de escuelas profesionales y el interés en su incorporación en la educación superior en general ha ido incrementándose
    día a día.
  2. ¿POR QUÉ CAMBIAR?
    En las últimas décadas hemos sido testigos
    de los grandes cambios producidos en casi
    todos los aspectos de nuestra vida: la manera
    como nos comunicamos, se dirigen los negocios, se accede a la información y se utiliza
    la tecnología, son ejemplos claros. Actualmente nuestros estudiantes deben prepararse para
    incorporarse a un entorno laboral muy diferente al que existía hace solo diez años atrás.
    Los problemas que estos futuros profesionales deberán enfrentar cruzan las fronteras de
    las disciplinas y demandan enfoques innovadores y habilidades para la resolución de
    problemas complejos.
    Muy pocos docentes en la educación superior tienen algún tipo de formación en
    pedagogía, simplemente enseñan como les
    enseñaron, es decir, a través de clases expositivas. Esta modalidad de enseñanza normalmente está focalizada hacia los contenidos,
    priorizando los conceptos abstractos sobre
    los ejemplos concretos y las aplicaciones. Las
    técnicas de evaluación se limitan a comprobar la memorización de información y de
    hechos, ocupándose muy rara vez de desafiar al estudiante a alcanzar niveles cognitivos
    más altos de comprensión. De esta manera,
    147
    tanto profesores como alumnos refuerzan la
    idea de que en el proceso de enseñanzaaprendizaje el profesor es el responsable de
    transferir contenidos y los estudiantes son
    receptores pasivos del conocimiento.
    En junio de 1994 se llevó a cabo la Conferencia de Wingspread, la cual congregó a
    autoridades estatales y federales, así como a
    líderes de comunidades reconocidas, corporativas, filantrópicas y de educación superior, con el fin de debatir en torno a la calidad de la educación en el nivel de pre-grado
    en Norteamérica, ya que se reconocía la necesidad de mejorar la preparación de los estudiantes para que puedan desempeñarse
    adecuadamente en el ámbito bursátil e industrial de hoy. Esta conferencia fue patrocinada por la Comisión Educativa de los
    Estados Unidos (Education Comission of
    the States – ECS), la Fundación Johnson, la
    Asociación de Gobernadores Nacionales y
    la Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales. Una importante conclusión de este
    evento fue la identificación de las principales características relacionadas con la calidad
    de los graduados universitarios (Duch et al.,
    2001):
    – Habilidades de alto nivel en comunicación, computación, manejo tecnológico
    y búsqueda de información, que permitan al individuo obtener y aplicar los nuevos conocimientos y habilidades cuando
    se requiera.
    – Capacidad para llegar a juicios y conclusiones sustentadas, lo cual significa definir efectivamente los problemas; recoger
    y evaluar la información relativa a esos
    problemas y desarrollar soluciones.
    – Capacidad de funcionar en una comunidad global a través de la posesión de actitudes y disposiciones que incluyen la flexibilidad y adaptabilidad; la valoración
    de la diversidad; la motivación y la persistencia; conducta ética y ciudadana;
    creatividad e ingenio y la capacidad para
    trabajar con otros, especialmente en equipo.
    – Competencia técnica en un campo determinado.
    – Demostrada capacidad para desplegar
    todas las características anteriores para
    enfrentar problemas específicos en situaciones reales y complejas, en los que se
    requiera desarrollar soluciones viables.
    La enseñanza tradicional muy difícilmente contribuye a desarrollar estas habilidades,
    capacidades y competencias en los estudiantes. Es evidente entonces la necesidad de cambio en la concepción del proceso de enseñanza-aprendizaje, sin que esto signifique que la
    clase expositiva deje de ser eficiente. Se trata
    simplemente de complementar la adquisición
    de contenidos con el desarrollo de habilidades, capacidades y actitudes indispensables en
    el entorno profesional actual.
  3. ¿QUÉ ES EL ABP?
    Barrows (1986) define al ABP como “un
    método de aprendizaje basado en el principio de usar problemas como punto de partida para la adquisición e integración de los
    nuevos conocimientos”. Desde que fue propuesto en la Escuela de Medicina de la Universidad de McMaster, el ABP ha ido evolucionando y adaptándose a las necesidades de
    las diferentes áreas en las que fue adoptado,
    lo cual ha implicado que sufra muchas variaciones con respecto a la propuesta original. Sin embargo, sus características fundamentales, que provienen del modelo desarrollado en McMaster, son las siguientes
    (Barrows, 1996):
    El aprendizaje está centrado en el alumno
    Bajo la guía de un tutor, los estudiantes deben tomar la responsabilidad de su propio
    aprendizaje, identificando lo que necesitan
    Aprendizaje basado en problemas / P. MORALES B. Y V. LANDA F.
    148
    Theoria, Vol. 13: 2004
    conocer para tener un mejor entendimiento
    y manejo del problema en el cual están trabajando, y determinando dónde conseguir
    la información necesaria (libros, revistas,
    profesores, internet, etc.). Los profesores de
    la facultad se convierten en consultores de
    los estudiantes. De esta manera se permite
    que cada estudiante personalice su aprendizaje, concentrándose en las áreas de conocimiento o entendimiento limitado y persiguiendo sus áreas de interés.
    El aprendizaje se produce en grupos pequeños
    de estudiantes
    En la mayoría de las primeras escuelas de
    medicina que implementaron el ABP, los
    grupos de trabajo fueron conformados por
    5 a 8 ó 9 estudiantes. Al finalizar cada unidad curricular los estudiantes cambiaban
    aleatoriamente de grupo y trabajaban con
    un nuevo tutor. Esto les permitía adquirir
    práctica en el trabajo intenso y efectivo, con
    una variedad de diferentes personas.
    Los profesores son facilitadores o guías
    En McMaster el facilitador del grupo se denominaba tutor. El rol del tutor se puede
    entender mejor en términos de comunicación metacognitiva. El tutor plantea preguntas a los estudiantes que les ayude a cuestionarse y encontrar por ellos mismos la mejor
    ruta de entendimiento y manejo del problema. Eventualmente los estudiantes asumen
    este rol ellos mismos, exigiéndose así unos a
    otros. Con el fin de inhibir el riesgo de que
    el tutor caiga en la práctica tradicional de
    enseñanza y proporcione información y guía
    directa a los estudiantes, McMaster promovió el concepto del tutor no-experto, esto significaba que los profesores asumían la tutoría en unidades curriculares con contenidos
    en los que no eran expertos. Actualmente se
    ha comprobado que los mejores tutores son
    aquellos que son expertos en el área de estudio y además expertos en el difícil rol de tutor.
    Los problemas forman el foco de
    organización y estímulo para el aprendizaje
    En el ABP para medicina normalmente un
    problema de un paciente o de salud comunitaria se presenta a los estudiantes en un
    determinado formato, como un caso escrito, un paciente simulado, una simulación
    por computadora, un videotape, etc. El problema representa el desafío que los estudiantes enfrentarán en la práctica y proporciona
    la relevancia y la motivación para el aprendizaje. Con el propósito de entender el problema, los estudiantes identifican lo que ellos
    tendrán que aprender de las ciencias básicas. El problema así les da un foco para integrar información de muchas disciplinas.
    La nueva información es asociada también
    con problemas de pacientes presentes. Todo
    esto facilita que posteriormente ellos recuerden y apliquen lo aprendido en futuros pacientes.
    Los problemas son un vehículo para el
    desarrollo de habilidades de resolución
    de problemas clínicos
    En el contexto de la educación médica, para
    que esto suceda, el formato del problema
    tiene que presentar el caso del paciente de la
    misma manera que ocurre en el mundo real,
    en donde sólo se tiene información de los
    dolores y síntomas manifestados. El formato debe permitir también que los estudiantes formulen preguntas al paciente, realicen
    exámenes físicos y ordenen análisis de laboratorio, todo en alguna secuencia. Los resultados de estas indagaciones se van proporcionando conforme avanza el trabajo a
    lo largo del problema.
    Cuando la metodología ABP se adapta a
    otras especialidades, esta característica se traduce en presentar un problema del mundo
    149
    real o lo más cercano posible a una situación real, relacionada con aplicaciones del
    contexto profesional en el que el estudiante
    se desempeñará en el futuro.
    La nueva información se adquiere a través
    del aprendizaje autodirigido
    Como corolario a todas las características
    antes descritas (el currículo centrado en el
    estudiante y el profesor como facilitador del
    aprendizaje), se espera que los estudiantes
    aprendan a partir del conocimiento del mundo real y de la acumulación de experiencia
    por virtud de su propio estudio e investigación. Durante este aprendizaje autodirigido,
    los estudiantes trabajan juntos, discuten,
    comparan, revisan y debaten permanentemente lo que han aprendido.
  4. LAS TEORÍAS EDUCATIVAS Y
    LOS EFECTOS DEL ABP EN EL
    APRENDIZAJE
    Los descubrimientos de la psicología
    cognitiva proporcionan una base teórica para
    el mejoramiento de la instrucción en general y para el aprendizaje basado en problemas en particular. Se considera como una
    premisa básica que el aprendizaje es un proceso de construcción del nuevo conocimiento sobre la base del conocimiento previo. De
    acuerdo a Glaser (1991), se pueden establecer claramente tres principios relacionados
    con el aprendizaje y los procesos cognitivos:
    el aprendizaje es un proceso constructivo y
    no receptivo, el proceso cognitivo llamado
    metacognición afecta el uso del conocimiento, y los factores sociales y contextuales tienen influencia en el aprendizaje.
    El aprendizaje es un proceso constructivo
    y no receptivo
    Hasta hace unos veinte o treinta años, el concepto de aprendizaje predominante en el
    ámbito educativo se traducía en un proceso
    de llenado de las mentes de los estudiantes
    con la mayor cantidad de información posible, a través de la repetición y el ensayo. Los
    estudiantes, según este concepto, almacenaban conocimiento en la memoria y la recuperación de la información dependía de la
    calidad de la codificación utilizada por ellos
    para clasificarla. Sin embargo, la psicología
    cognitiva moderna señala que una de las características más importantes de la memoria
    es su estructura asociativa. El conocimiento
    está estructurado en redes de conceptos relacionados, llamadas redes semánticas. Cuando se produce el aprendizaje la nueva información se acopla a las redes existentes. Dependiendo de la manera cómo se realice este
    proceso, la nueva información puede ser recuperada con menor esfuerzo y utilizada para
    resolver problemas, reconocer situaciones o
    guardar efectivamente el conocimiento.
    Las redes semánticas no son solamente
    una manera de almacenar información, ellas
    también tienen influencia sobre la forma
    cómo se le interpreta y memoriza. Por ejemplo, cuando se lee un texto nuevo, ciertos
    pasajes activarán las redes que contienen el
    conocimiento existente necesario para construir y retener el significado del nuevo texto. Si esto no ocurre, se inhibe la comprensión de la lectura (Gijselaers, 1996).
    La metacognición afecta el aprendizaje
    Este segundo principio señala que el aprendizaje es más rápido cuando los estudiantes
    poseen habilidades para el auto-monitoreo,
    es decir, para la metacognición.
    La metacognición es vista como un elemento esencial del aprendizaje experto: establecimiento de metas (¿Qué voy a hacer?),
    selección de estrategias (¿Cómo lo estoy haciendo?) y la evaluación de los logros (¿Funcionó?). La resolución exitosa de problemas
    no sólo depende de la posesión de un gran
    bagaje de conocimiento, sino también del
    Aprendizaje basado en problemas / P. MORALES B. Y V. LANDA F.
    150
    Theoria, Vol. 13: 2004
    uso de los métodos de resolución para alcanzar metas. Los buenos estudiantes detectan cuándo ellos entendieron o no un texto
    y saben cuándo utilizar estrategias alternativas para comprender los materiales de aprendizaje.
    Las habilidades metacognitivas involucran la capacidad de monitorear la propia
    conducta de aprendizaje, esto implica estar
    enterado de la manera cómo se analizan los
    problemas y de si los resultados obtenidos
    tienen sentido. Un aprendiz experto constantemente juzga la dificultad de los problemas y evalúa su progreso en la resolución de
    los mismos.
    Brunnig y colaboradores (1995) proponen
    varias estrategias de enseñanza que son útiles
    para desarrollar la metacognición: motivar a
    los estudiantes a involucrarse profundamente en el proceso; enfocarse en la comprensión
    en vez de la memorización superficial; promover la elaboración de nuevas ideas; ayudar
    a los estudiantes a plantearse preguntas que
    puedan ellos mismos responderse durante la
    resolución del problema.
    Los factores sociales y contextuales tienen
    influencia sobre el aprendizaje
    Este principio se relaciona con el uso del
    conocimiento. La conducción de los estudiantes hacia la comprensión del conocimiento y a que sean capaces de utilizar los
    procesos de resolución de problemas se han
    convertido en las metas más ambiciosas de
    la educación superior. Para poder alcanzarlas se han propuesto algunas estrategias que
    pueden contribuir a que la enseñanza universitaria sea más efectiva (Gijselaers, 1996):
    la instrucción debe colocarse en un contexto de situaciones problemáticas complejas y
    significativas; debe enfocarse en el desarrollo de habilidades metacognitivas; el conocimiento y las habilidades deben enseñarse
    desde diferentes perspectivas y aplicados en
    muchas situaciones diferentes; la instrucción
    debe tener lugar en situaciones de aprendizaje colaborativo de tal manera que los estudiantes puedan confrontar entre ellos sus
    conocimientos y planteamientos. Estas estrategias se basan en dos modelos de aprendizaje contextualizado: el Aprendizaje Cognitivo (Collins et al., 1989) y la Instrucción
    Anclada (Bransford et al., 1990). Ambos
    modelos enfatizan que la enseñanza debe
    tener lugar en el contexto de problemas del
    mundo real o de la práctica profesional. En
    el Aprendizaje Cognitivo se considera que
    se alcanzan mayores logros cuando los estudiantes tienen la oportunidad de ver cómo
    los expertos usan el conocimiento y las habilidades metacognitivas en un problema. Ellos
    necesitan ver cómo los expertos analizan los
    problemas, se retroalimentan de sus propias
    acciones y proponen sugerencias durante el
    proceso. En la Instrucción Anclada, los alumnos estudian los conceptos en un extenso período, en una variedad de contextos. A través
    de la conexión del contenido con el contexto, el conocimiento se hace más accesible
    cuando se confronta con nuevos problemas.
    Loa factores sociales también tienen influencia sobre el aprendizaje del individuo.
    Glaser (1991) señala que en el trabajo en
    pequeños grupos, la exposición del aprendiz a puntos de vista alternativos al suyo es
    un gran desafío para iniciar la comprensión.
    Al trabajar en grupo los estudiantes exponen sus métodos de resolución de problemas y su conocimiento de los conceptos,
    expresan sus ideas y comparten responsabilidades en el manejo de las situaciones problemáticas. Al estar en contacto con diferentes puntos de vista sobre un problema,
    los estudiantes se sienten estimulados para
    plantearse nuevas interrogantes.
    A lo largo del proceso de adopción del
    ABP en las distintas especialidades e instituciones se ha logrado identificar claramente el efecto que produce en el aprendizaje.
    Se puede mencionar entre los más importantes:
    151
    Facilita la comprensión de los nuevos
    conocimientos, lo que resulta indispensable
    para lograr aprendizajes significativos
    Según Coll (1988), si el estudiante logra establecer conexiones sustantivas y no arbitrarias o al pie de la letra entre la información
    que va recibiendo y el conocimiento previo,
    se habrá asegurado no sólo la comprensión
    de la información recibida, sino también la
    significatividad del aprendizaje. El aprendizaje significativo se distingue por esta característica y una adicional, que es que el alumno ha de adoptar una actitud favorable para
    tal tarea, dotando de significado propio a
    los contenidos que asimila. Para esto, en la
    mente del individuo debe haberse producido una revisión, modificación y enriquecimiento de sus estructuras de pensamiento,
    estableciendo nuevas conexiones y relaciones que aseguran la memorización comprensiva de lo aprendido.
    El ABP promueve la disposición afectiva y
    la motivación de los alumnos, indispensables
    para lograr aprendizajes significativos
    Dada la complejidad de los procesos mentales y cognitivos involucrados en el proceso de lograr aprendizajes significativos,
    Ausubel (1976) considera que una tarea fundamental del docente es asegurar que se haya
    producido la suficiente movilización afectiva
    y volitiva del alumno para que esté dispuesto a aprender significativamente; tanto para
    iniciar el esfuerzo mental requerido como
    para sostenerse en él.
    El ABP provoca conflictos cognitivos en
    los estudiantes
    Según Piaget (1999), los aprendizajes más
    significativos, relevantes y duraderos se producen como consecuencia de un conflicto
    cognitivo, en la búsqueda de la recuperación
    del equilibrio perdido (homeostasis). Si el
    individuo no llega a encontrase en una situación de desequilibrio y sus esquemas de
    pensamiento no entran en contradicción,
    difícilmente se lanzará a buscar respuestas, a
    plantearse interrogantes, a investigar, a descubrir, es decir, a aprender. El conflicto cognitivo se convierte en el motor afectivo indispensable para alcanzar aprendizajes significativos y además garantiza que las estructuras de pensamiento se vean modificadas.
    En el ABP el aprendizaje resulta
    fundamentalmente de la colaboración
    y la cooperación
    Para Vigotsky (Álvarez y Del Río, 2000), el
    aprendizaje es una actividad social, que resulta de la confluencia de factores sociales,
    como la interacción comunicativa con pares y mayores (en edad y experiencia), compartida en un momento histórico y con determinantes culturales particulares. Para él,
    el aprendizaje es más eficaz cuando el aprendiz intercambia ideas con sus compañeros y
    cuando todos colaboran o aportan algo para
    llegar a la solución de un problema. En esta
    perspectiva, uno de los roles fundamentales
    del profesor es el fomentar el diálogo entre
    sus estudiantes y actuar como mediador y
    como potenciador del aprendizaje.
    El ABP permite la actualización de la Zona
    de Desarrollo Próximo de los estudiantes
    El concepto de Zona de Desarrollo Próximo es uno de los más importantes del pensamiento de Vigotsky (Álvarez y Del Río,
    2000). Consiste en la distancia imaginaria
    entre el nivel real de desarrollo (capacidad
    para aprender por sí solo) y el nivel de desarrollo potencial (aprender con el concurso
    de otras personas), ésta delimita el margen
    de incidencia de la acción educativa. La educación debe partir del nivel de desarrollo
    efectivo del alumno, pero no para acomodarse a él, sino para hacerlo progresar a traAprendizaje basado en problemas / P. MORALES B. Y V. LANDA F.
    152
    Theoria, Vol. 13: 2004
    vés de su zona de desarrollo próximo, para
    ampliarla y para generar eventualmente otras
    nuevas.
  5. EL PROCESO DEL ABP
    El Aprendizaje Basado en Problemas (ABP)
    es una estrategia de enseñanza- aprendizaje
    que se inicia con un problema real o realístico,
    en la que un equipo de estudiantes se reúne
    para buscarle solución. El problema debe
    plantear un conflicto cognitivo, debe ser retador, interesante y motivador para que el
    alumno se interese por buscar la solución.
    Este problema debe ser lo suficientemente
    complejo, de manera tal que requiera de la
    cooperación de los participantes del grupo
    para abordarlo eficientemente. La complejidad de éste debe estar controlada por el
    profesor, para evitar que los estudiantes se
    dividan el trabajo y se limiten a desarrollar
    sólo una parte, como ocurre en ciertas actividades grupales.
    El ABP se convierte en un desafío para el
    alumno, obligándolo a que se comprometa
    a fondo en la búsqueda del conocimiento.
    Por eso se dice que el ABP es una estrategia
    de aprendizaje que permite producir cambios
    significativos en los estudiantes.
    El ABP está centrado en el estudiante, pero
    promueve el desarrollo de una cultura de
    trabajo colaborativo, involucra a todos los
    miembros del grupo en el proceso de aprendizaje, promueve habilidades interpersonales, propicia la participación de los alumnos, generando que desempeñen diferentes
    roles en las labores propias de las actividades diseñadas, que les permitirán ir adquiriendo los conocimientos necesarios para
    enfrentarse al problema retador. Estimula la
    valoración del trabajo en equipo, desarrollando un sentimiento de pertenencia al
    mismo; permite que los estudiantes adquieran un conjunto de herramientas, que lo
    conducirán al mejoramiento de su trabajo y
    su adaptación al mundo cambiante. Crea
    nuevos escenarios de aprendizaje promoviendo el trabajo interdisciplinario.
    El ABP insiste en la adquisición de conocimientos y no en la memorización de los
    mismos con propósitos inmediatistas, permite la integración del conocimiento posibilitando una mayor retención y la transferencia del mismo a otros contextos. Estimula la
    adquisición de habilidades para identificar
    problemas y ofrecer soluciones adecuadas a
    los mismos, promoviendo de esta manera el
    pensamiento crítico.
    El ABP alienta en todo momento a los
    estudiantes a una identificación positiva con
    los contenidos de la materia, relacionándolos de manera más congruente con la realidad. Promueve la evaluación formativa, lo
    que permite a los alumnos identificar y corregir los errores a tiempo, así como asegurar el alcance de las metas tanto de los estudiantes como de los docentes.
    Este modelo busca establecer una metodología orientada a promover el desarrollo
    intelectual, científico, cultural y social del
    estudiante. Sus métodos, en todo momento
    (la evaluación incluida), favorecen que el
    estudiante aprenda a aprender, permitiendo
    tomar conciencia metacognitiva es decir
    darse cuenta de sus propios procesos de pensar y aprender y este conocimiento consciente permite su mejoramiento.
    La condición fundamental para la utilización del ABP se relaciona con la forma en
    que se construyen las experiencias problema.
    Su diseño debe garantizar el interés de los
    estudiantes; debe relacionarse con los objetivos del curso y con situaciones de la vida real.
    Deben conducir al estudiante a tomar decisiones o a hacer juicios basados en hechos,
    en información lógica y fundamentada.
    153
    Es importante precisar que la innovación
    educativa representada por el ABP implica un
    cambio significativo que involucra la redefinición de valores y objetivos del programa
    académico, la modificación de roles del profesor y del estudiante, la transformación del
    proceso de enseñanza-aprendizaje y, en ocasiones, de la cultura de la institución, por lo
    que no es un proceso menor, de simple adecuación o actualización de contenidos.
    El docente juega un papel fundamental
    como facilitador del aprendizaje, en todo
    momento debe desarrollar las habilidades
    para facilitar el conocimiento, guiando a sus
    alumnos a través de la resolución del problema planteado. Debe además generar en
    ellos disposición para trabajar de esta forma, retroalimentándolos constantemente
    sobre su participación en la solución del problema y reflexionando con ellos sobre las
    habilidades, actitudes y valores estimulados
    por la forma de trabajo.
    Lo expresado anteriormente nos permite
    comprender que para aplicar el ABP se requiere de un cambio en el rol del profesor,
    que pasa de una situación protagónica (método tradicional) a la de un facilitador, el
    docente se convierte en un estratega que
    deberá desarrollar una serie de procesos y
    actividades necesarias para conseguir que sus
    alumnos construyan su conocimiento y que,
    una vez adquiridos, se mantengan en el tiempo, para después aplicarlos a otras situaciones. Todo esto es posible gracias al dominio
    que posee el docente de la materia impartida, su capacidad creativa lo capacita para
    transformar su experiencia en situaciones
    que le permitan llevar con éxito el proceso
    de enseñanza-aprendizaje. Es claro también
    que no sólo existe una modificación del rol
    de profesor, el estudiante también debe cambiar su forma de actuar, debe convertirse en
    un estudiante activo, que trabaja
    cooperativamente y que asume la responsabilidad de su proceso de aprendizaje.
  6. CÓMO ENFRENTAR EL ABP
    Lo primero que el profesor deberá tener en
    cuenta al enfrentar el diseño de sus clases
    siguiendo la metodología ABP, son los objetivos de aprendizaje que se pretenden alcanzar con la resolución del problema retador y
    complejo con el que se desafiará a los alumnos.
    Es claro que no existe una receta única
    para el diseño del ABP, pero la mayoría de los
    autores coinciden en que hay que seguir una
    serie de pasos básicos que pueden sufrir algunas variaciones dependiendo de: el número de alumnos, el tiempo disponible, los
    objetivos que se quiere alcanzar, la bibliografía disponible, los recursos con que cada
    profesor y entidad educativa cuenta, etc.
    Una vez que el profesor tiene definidos
    los objetivos, el tiempo de duración de la experiencia, la forma de evaluar el problema y
    el proceso a seguir, podrá comenzar a construir el problema retador. Concluido el problema, él deberá diseñar las estrategias de
    aprendizaje que le permitirán al alumno adquirir los conocimientos necesarios para darle solución.
    La ruta que siguen los estudiantes durante
    el desarrollo del proceso ABP se pueden sintetizar en:
    Aprendizaje basado en problemas / P. MORALES B. Y V. LANDA F.
    154
    Theoria, Vol. 13: 2004
    Paso 1
    Leer y Analizar el escenario del problema
    Se busca con esto que el alumno verifique su comprensión del escenario mediante
    la discusión del mismo dentro de su equipo de trabajo.
    Paso 2
    Realizar una lluvia de ideas
    Los alumnos usualmente tienen teorías o hipótesis sobre las causas del problema;
    o ideas de cómo resolverlo. Estas deben de enlistarse y serán aceptadas o rechazadas, según se avance en la investigación.
    Paso 3
    Hacer una lista de aquello que se conoce
    Se debe hacer una lista de todo aquello que el equipo conoce acerca del problema
    o situación.
    Paso 4
    Hacer una lista de aquello que se desconoce
    Se debe hacer una lista con todo aquello que el equipo cree se debe de saber para
    resolver el problema. Existen muy diversos tipos de preguntas que pueden ser
    adecuadas; algunas pueden relacionarse con conceptos o principios que deben
    estudiarse para resolver la situación.
    Paso 5
    Hacer una lista de aquello que necesita hacerse para resolver el problema
    Planear las estrategias de investigación. Es aconsejable que en grupo los alumnos
    elaboren una lista de las acciones que deben realizarse.
    Paso 6
    Definir el problema
    La definición del problema consiste en un par de declaraciones que expliquen claramente lo que el equipo desea resolver, producir, responder, probar o demostrar.
    Paso 7
    Obtener información
    El equipo localizará, acopiará, organizará, analizará e interpretará la información
    de diversas fuentes.
    Paso 8
    Presentar resultados
    El equipo presentará un reporte o hará una presentación en la cual se muestren las
    recomendaciones, predicciones, inferencias o aquello que sea conveniente en relación a la solución del problema.







    155
    El ABP recorre una amplia gama de esquemas de instrucción, que pueden ir desde:
    La investigación dirigida por el (los)
    docentes de un curso
    Los docentes conducen la investigación, proporcionan bibliografía o señalan dónde encontrarla, y desarrollan actividades que les
    permitan garantizar que los alumnos están
    adquiriendo los conocimientos necesarios.
    La investigación dirigida por el docente
    y los alumnos
    La labor es compartida, el docente controla
    el avance de la investigación, la bibliografía
    es buscada por los estudiantes. En esta modalidad los estudiantes y profesores analizan
    hasta que punto seguirán investigando.
    La investigación dirigida por los alumnos
    En esta modalidad, frente a la situación problemática presentada, los alumnos realizan
    una búsqueda de información pertinente,
    para después analizar y relacionar esta información con lo que ya saben y luego generar
    las preguntas correspondientes.
    Cualquiera de las modalidades señaladas
    anteriormente basa su desarrollo en situaciones complejas, sólidas y problemáticas
    que conducen a la investigación. La modalidad a escoger estará directamente relacionada con la experticia del profesor en estas
    técnicas, con la naturaleza del curso, con los
    objetivos propuestos, con la madurez de los
    alumnos y por último con las disposiciones
    académicas de la institución.
  7. EVALUACIÓN DEL PROCESO
    El llegar a la solución del problema, genera
    en el camino un sinnúmero de actividades
    que pueden ser evaluadas, entre ellas: el trabajo de cada individuo, la presentación del
    equipo, el reporte escrito del grupo, los conocimientos adquiridos, etc.
    En la aplicación del ABP el profesor, al
    mismo tiempo que proporciona el problema, debe indicar cuáles serán los criterios
    de evaluación, esto se puede llevar a cabo a
    través de una rúbrica o matriz de valoración.
    Es importante considerar, en el momento
    de planificar la evaluación, tanto el aporte
    individual como el trabajo grupal. Resulta
    valioso considerar también la evaluación del
    trabajo como grupo humano, siendo el profesor el encargado de la elección de unos u
    otros aspectos, así como de la ponderación
    de los mismos.
    A continuación, se presentan algunas acciones susceptibles de evaluación:
    Aporte individual
    Es el trabajo –en forma de reporte, ensayo,
    etc.– que un alumno genera como producto de sus actividades para la solución del
    problema y como parte de un equipo. Puede ser el análisis o síntesis de cierta información, la obtención de datos experimentales
    o algún otro producto que demuestre su trabajo individual.
    Aporte en equipo
    Es semejante al trabajo o aporte individual,
    pero ahora como resultado del trabajo conjunto del equipo.
    Evaluación del compañero (co-evaluación)
    Es la evaluación que hace un alumno a sus
    compañeros, en base a una tabla de características y nivel de desempeño.
    Autoevaluación
    Es la evaluación que hace el alumno sobre sí
    mismo con base en una reflexión de lo que
    ha aprendido y su contraste con los objetivos del problema o curso.
    Aprendizaje basado en problemas / P. MORALES B. Y V. LANDA F.
    156
    Theoria, Vol. 13: 2004
  8. IMPORTANCIA DEL ABP
    Barrel (1999) señala algunas razones, basadas en investigaciones, que fundamentan la
    importancia del ABP:
    –El procesamiento de la información en los
    niveles superiores, tal como se da en la resolución de situaciones problemáticas, el
    pensamiento critico, las estrategias de indagación y la reflexión sobre la práctica conducen a una compresión más profunda
    (Perkins et al., 1990); la autodirección
    (McCombs, 1991), y una retención y transferencia superiores de la información y los
    conceptos (Bransford et al., 1986; Mayer,
    1983).
    –El aprendizaje es mayor cuando las personas usan la información de manera significativa (Marzano, 1997).
    –Tres metas centrales de la educación son la
    retención; la compresión y el uso o la aplicación de la información, los conceptos,
    las ideas, los principios y las habilidades
    (Perkins et al., 1990).
    –En experimentos controlados, los estudiantes que utilizan el ABP en clase mostraron
    un incremento significativo en el uso de
    estrategias para la resolución de problemas
    y obteniendo tanta información, y muchas
    veces más, que los estudiantes en clases tradicionales (Stepien, 1993).
  9. DESARROLLO ACTUAL DEL ABP
    El ABP, como modelo educativo, ha venido
    desempeñando un papel preponderante en
    el diseño de nuevas propuestas curriculares,
    encontrándose sus orígenes –como ya se
    mencionara– en el ámbito de la medicina,
    donde viene funcionando desde hace más
    de 30 años en instituciones de prestigio internacional, como McMaster (Canadá) y
    Maastrich (Holanda). Posteriormente fue
    introducido en un gran número de facultades de Medicina de EE.UU. y en algunas
    instituciones europeas.
    En México se ha incorporado en forma
    paulatina en el ITESM y en los Núcleos de
    Calidad Educativa (NUCE) en la UNAM;
    lo mismo ha venido ocurriendo en la Facultad de Medicina de la Universidad San
    Simón en Cochabamba, Bolivia.
    Sin embargo, la adopción del modelo
    ABP no se ha limitado al área de la salud,
    dado que existen ya numerosas evidencias
    de la efectividad del método para alcanzar las
    metas de formación de los estudiantes para el
    mundo de hoy, se ha venido implementando
    en una diversidad de especialidades, como son
    las diferentes áreas de la ingeniería, de ciencias económico-administrativas (contabilidad,
    administración) y en ciencias sociales (derecho, trabajo social, psicología). Algunas de las
    instituciones educativas que vienen implementando esta metodología en sus cursos o
    en sus estructuras curriculares son las universidades de Delaware, Wheeling, WestVirginia, en los Estados Unidos; Universidad de British Columbia, en Vancouver,
    Canadá; la Pontificia Universidad Católica
    del Perú, entre otras.
    REFERENCIAS
    ÁLVAREZ A., DEL RÍO P. (2000) Educación y desarrollo: la teoría de Vigotsky y la zona de desarrollo próximo. En COLL C, PALACIOS J,
    MARCHESI A (eds.) Desarrollo Psicológico y
    Educación II, Madrid: Alianza Editorial.
    AUSUBEL D. (1976), Psicología Educativa, Un
    Punto de Vista Cognoscitivo, México: Ed. Trillas.
    BARREL J. (1999) Aprendizaje basado en Problemas, un Enfoque Investigativo. Buenos Aires,
    Argentina: Editorial Manantial.
    BARROWS H.S. (1986) A Taxonomy of problembased learning methods, Medical Education, 20:
    481-486.
    BARROWS H. (1996) Problem-Based learning in
    medicine and beyond: A brief overview. In
    WILKERSON L., GIJSELAERS W.H. (eds)
    Bringing Problem-Based Learning to Higher
    157
    Education: Theory and Practice, San Francisco:
    Jossey-Bass Publishers, pp. 3-12.
    BRANSFORD J.D., STEIN B.S. (1986) Solución
    Ideal de Problemas. Guía para mejor pensar,
    aprender y crear. Barcelona, España: Labor.
    BRANSFORD J.D., SHERWOOD R.D.,
    HASSELBRING T.S., KINSER C.K., WILLIAMS S.M. (1990), Anchored instruction: why
    we need it and how technology can help. In NIX
    D, SPIRO R. (eds.) Cognition, Education and
    Multimedia: Exploring Ideas in High Technology, Hillsdale, New Jersey: Erlbaum.
    BRUNNING R.H., SCHRAW G.J., RONNING
    R.R. (1995), Cognitive Psychology and
    Instruction 2nd ed., Englewoods Cliffs (ed.) New
    Jersey: Prentice Hall.
    COLL C. (1988) Significado y sentido en el aprendizaje escolar. Reflexiones en torno al concepto
    de aprendizaje significativo. En Infancia y Aprendizaje N° 41, pp. 131-142.
    COLLINS A., BROWN J.S., NEWMAN S. (1989),
    Cognitive apprenticeship: teaching the crafts of
    reading, writing and mathematics. In RESNICK
    L.B. (ed.) Knowing, Learning and Instruction:
    Essays in the Honor of Robert Glaser, Hillsdale,
    New Jersey: Erlbaum.
    DUCH B.J., GROH S.E., ALLEN D.E. (2001) Why
    Problem-Based Learning? A Case Study of
    Institutional Change in Undergraduate
    Education. In DUCH BJ, GROH SE, ALLEN
    DE (eds.) The Power of Problem-Based Learning,
    Virginia:Stylus Publishing, pp. 3-11.
    FLY J., SEDERBURG O. (1998) Estrategias para
    enseñar a aprender. Buenos Aires: Aique.
    GIJSELAERS W.H. (1996) Connecting problembased practices with educational theory. In
    WILKERSON L, GIJSELAERS W.H. (eds)
    Bringing Problem-Based Learning to Higher
    Education: Theory and Practice, San Francisco:
    Jossey-Bass Publishers, pp. 13-21.
    GLASER R. (1991) The Maturing of the relationship
    between the science of learning and cognition and
    educational practice, Learning and Instruction,
    1: 129-144.
    MARZANO R. (1997) Dimensiones del aprendizaje. Guadalajara: Iteso.
    MAYER R. (1983) Pensamiento, Resolución de Problemas y Cognición. España: Ediciones Paidós.
    McCOMBS B.L. (1991) Overview: Where have been
    and where are we going in understanding human
    motivation? Journal of Experimental Education,
    60 (1), 5-14. Special Issue on Unraveling
    motivation: New perspectives from research and
    practice.
    PERKINS D.N., SIMMONS R., TISHMAN S.
    (1990) Teaching cognitive and metacognitive
    strategies, Journal of Structural Learning, 10 (4),
    285-292.
    PIAGET J. (1999), Psicología de la Inteligencia,
    Madrid: Ed. Psique.
    STEPIEN W.J. (1993) Problem-based Learning: As
    Authentic as It Gets. Educational Leadership 50,
    no. 7:25-28.

APRENDIZAJE BASADO EN CASOS: QUÉ ES Y CÓMO SE APLICA EN EL AULA

El aprendizaje basado en casos enfrenta al estudiante con ‘circunstancias’ de la vida real aplicadas a las materias de cada nivel educativo y que tiene que resolver a través del análisis, el pensamiento crítico y el trabajo colaborativo. A continuación, mostramos en qué consiste y su aplicación en el aula.

¿Qué es?

El aprendizaje basado en casos es una estrategia didáctica gracias a la cual los estudiantes modulan su aprendizaje a través del análisis, la investigación, la propuesta de soluciones y el debate en grupo. Para ello, hacen uso de casos prácticos (en su mayoría reales) que les ayuda a fomentar habilidades como el pensamiento crítico y el trabajo colaborativo de cara a su futuro profesional. 

Según la pedagoga y escritora estadounidense Selma Wassermann, una reconocida experta en la metodología, en este tipo de aprendizaje «los casos se consideran instrumentos educativos complejos que aparecen en forma de narrativas». Dichas narrativas se generan en torno a problemas o situaciones que ocurren en la vida real (aunque también pueden ser ficticios). De este modo, los casos se centran en distintas materias y asignaturas y cada uno de ellos incluye información y datos (de tipo psicológico, sociológico, científico, antropológico, histórico u observacional), además de material técnico. 

Asimismo, algunos expertos consideran que este aprendizaje es un complemento al Aprendizaje Basado en Problemas (ABPr), en el que se activa la enseñanza a través de la investigación y la discusión de un problema real. Y aunque existen similitudes, como las que indica la maestra chilena Maria Elena Cares Rubio: «ambos fomentan el aprendizaje colaborativo, están autodirigidos por un docente e impulsan una enseñanza constructivista»; también se encuentran diferencias. 

Cares Rubio indica que la principal diferencia entre el aprendizaje basado en casos y el basado en problemas es, sobre todo, el tipo de conocimiento con el que se afrontan las actividades de uno u otro. Mientras que en el aprendizaje basado en casos, el alumnado tiene que tener ciertos conocimientos previos del tema a tratar para poder resolverlo; en el ABPr no es necesario, puesto que el objetivo de este aprendizaje es que los estudiantes aprendan sobre un contenido determinado. Oportunidades en el aula

A nivel de aprendizaje, este tipo de enseñanza proporciona a los estudiantes una serie de capacidades y habilidades de gran utilidad para su futuro profesional. Así, el alumnado debe tomar sus propias decisiones ante un caso práctico, en el que a partir de una descripción general y una serie de conocimientos previos (basados en los contenidos teóricos de la materia en cuestión) tiene que aplicar una serie de soluciones al mismo. Para llegar a dichas soluciones, pone en práctica el análisis y la reflexión, además de promover la creatividad. Por otro lado, el trabajo colaborativo es fundamental para llegar a la resolución del caso. 

En el libro ‘Estudio de casos como método de enseñanza’ de Selma Wassermann se indican algunas de las características de este aprendizaje para llevar a cabo con los estudiantes. Una de ellas son las respuestas críticas a las preguntas formuladas en el caso, obligando a los estudiantes a examinar y reflexionar acerca de todas las ideas que lo envuelven. Por otro lado, también desarrolla una serie de habilidades comunicativas ya que es necesario explicar, responder a formulaciones y hacer uso de un lenguaje especializado, fruto del conocimiento previo en el caso a tratar. Del mismo modo, la comunicación entre docente y alumno se intensifica, ya que el profesor dirige al grupo y hace de guía y apoyo en todo el proceso de aprendizaje.Aplicación

Asimismo, Wassermann indica que para aplicar la enseñanza basada en casos entre los estudiantes hay que tener en cuenta los siguientes aspectos:

  • Vínculo con el currículo: al menos uno de los temas que se analice en el caso debe focalizar conceptos relacionados con el currículo. 
  • Una narrativa interesante con un lenguaje accesibleel relato tiene que estar bien estructurado, con el fin de que el estudiante pueda imaginar la situación sin esfuerzos. Una cuestión que se facilita con un lenguaje apropiado al nivel educativo y los conocimientos sobre el tema a tratar. 
  • La importancia de las emociones: intensificar las emociones en el alumnado compromete y motiva al alumno a querer resolver el caso.
  • Generar debate y autonomíala solución a un caso en concreto no tiene porqué tener un final feliz. Para Wassermann promover el pensamiento crítico y la capacidad para que el alumno tome decisiones por sí mismo.

Otros enlaces de interés

Libro: ‘El estudio de casos como método de enseñanza’

Las diferencias entre el aprendizaje basado en casos y el ABP

El aprendizaje basado en problemas y el método de casos

Biografía de Selma Wassermann